
El padre que va con sus hijos el domingo a comer a un restaurante.
Cuando acaban de comer se acerca el camarero:
- Me puede traer una bolsa para la comida que ha sobrado
- Claro, sin problema, le dice el camarero.
- Es que tenemos un perro muy goloso
- Papi nos va a comprar un perro! Gritan los niños a la vez.